El 2 de marzo, en el marco del proyecto 4CE-MED, se celebró un taller para los socios de la cooperativa Alcamancha. La jornada fue organizada por Cooperativas Agro-alimentarias de España en estrecha colaboración con Camelina Company España, la Asociación Española de Agricultura de Conservación y Suelos Vivos (AEAC.SV) y Cooperativas Agro-alimentarias de Castilla La Mancha.
El objetivo era proporcionarles información sobre la conveniencia de incorporar la agricultura de conservación en sus explotaciones y diversificar con nuevos cultivos como la camelina, para beneficiarse de un mayor abanico de ayudas dentro de la nueva PAC 2023, al tiempo que aumentan la sostenibilidad y salud de sus suelos. La camelina es un cultivo en el que esta cooperativa tiene experiencia previa, y que fue replantado por algunos de sus socios el pasado mes de noviembre.
En primer lugar, Pablo Fernández, técnico de Cooperativas Agro-alimentarias de España, explicó a los 40 socios asistentes (entre los que se encontraban jóvenes y mujeres interesadas en diversificar sus cultivos y mejorar la sostenibilidad de sus explotaciones) el objetivo del proyecto 4CE-MED. Este proyecto pretende identificar los obstáculos y las oportunidades de la agricultura de conservación en la cuenca mediterránea. En este sentido, comentó que en España se pretende introducir la agricultura de conservación mediante el cultivo de camelina en siembra directa en las rotaciones de zonas poco productivas, especialmente de secano árido y semiárido (por debajo de 3.000 kg/ha), como las existentes en las comarcas de la Alcarria y Mancha Alta (Cuenca, España), a la vez que se proporcionan alternativas, se reduce la erosión del suelo, se aumenta la disponibilidad de materia orgánica y agua, y se garantiza un beneficio económico a corto plazo.
A continuación, Fernando Gil, técnico de Camelina Company España, informó sobre los ensayos que están realizando en España en el marco del proyecto 4CE-MED, aportando información detallada sobre el manejo agronómico del cultivo de camelina, precios, mercado, productos finales, ajustes necesarios en la maquinaria convencional para la siembra directa, etc., así como el estado de las parcelas sembradas en las propias fincas de la cooperativa. Llegado el momento de la recolección de estas parcelas, se organizará una visita de campo para que los socios de la cooperativa Alcamancha puedan ver in situ las características de este cultivo y recibir respuesta a las numerosas preguntas que surgieron durante la jornada.
Francisco Sánchez, técnico de la Asociación Española de Agricultura de Conservación y Suelos Vivos, se centró en las ventajas de la implantación de la agricultura de conservación, presentando datos contrastados sobre los beneficios ambientales (biodiversidad, fertilidad, conservación del suelo, secuestro y prevención de emisiones de CO2, humedad, etc.) y económicos (tiempo, combustible y otros costes) derivados de su aplicación, así como sobre las pautas a seguir en la implantación de los cultivos. Tras el seguimiento de los resultados de las parcelas de la cooperativa y de los ensayos realizados por Camelina Company España, se elaborará un informe sobre la introducción de la camelina en suelos áridos bajo agricultura de conservación.
La jornada finalizó con la intervención de Nuria Villanueva, del Gabinete de Dirección de Cooperativas Agro-alimentarias de Castilla-La Mancha. que expuso los detalles de los cambios introducidos para la nueva PAC 2023, en concreto, el impacto económico para los agricultores de Alcamancha a través de un análisis de las producciones y áreas de trabajo de la cooperativa. Su exposición destacó la necesidad de diversificar con cultivos como la camelina y utilizar prácticas más sostenibles, como la aplicación de los principios de la agricultura de conservación, para mantener la renta, que hasta ahora venían percibiendo, con la nueva PAC 2023.

Photo credit: spanish Coops (spanish farmers)